Queridos amigos/as es para mí un placer compartir mi visión de
lo que significa el buen y gustoso hábito de llevarse a la boca aquello que
tanto necesitamos y no solo necesario sino también agradable o gustoso para
nuestros sentidos. Es para mí un
sentimiento de alegría poder llegar hasta vosotros mostrando mis experiencias
casi siempre relacionada con el buen habito del comer. Sencillamente es para
agradecer a los que supervisan este medio que a una persona como yo, el cual
entiendo que escribir, si es de escribir de lo que me tuviera que ganarme la
vida, mi mujer ya me habría dejado y mis hijas hambre pasarían un poco, no…lo
siguiente. Si os cuento que me saque el graduado porque…por mis estudios no
fueron, por mi habilidad tampoco, por mí…por mi nada, más es gracias a mis
padrecitos, los pobres que ya se esforzaron.
Pero a lo que vamos, en la mañana de hoy jueves me he
levantado agradecido a tantos que hacen esta buena labor de transportarnos las
noticias de nuestra ciudad y de sus alrededores, con su visión particular de
las cosas. Agradecidos por que esta pequeña columnita continúa con vosotros ya
con un poco de tiempo, y aun no pocos me hacéis ver vuestra opinión de muchas y
diferentes maneras. Gracias a vosotros, al ATS del centro de salud, al maestro
de el colegio de El Juncal, al que trabaja arreglando las carreteras, y otros no
pocos que casi siempre me hacéis sentir, un poco alegre, al saber que un par de
minutos dedicáis a leer estas palabritas. Con faltas de ortografía, seguro
señor maestro, pero ya le dije por qué.
Anda, una cosa disculpen si a algunos moleste, nunca fue mi intención.
Bajo ningún propósito quise hacer daño a ninguno de vosotros.
No hay comentarios:
Publicar un comentario